El cuerpo rezumaba un líquido espeso, brillante, de cierto color amarillento.
Amelia se puso los guantes de goma mientras sus ojos realizaban la primera inspección del cadáver.
— Hombre joven, de unos veinte años —comenzó Amelia a constatar con su grabadora—. Caucásico, unos cuarenta kilos de peso. Presenta una grave desnutrición. Parece recubierto de un líquido amarillento. Las muestras se han enviado a analizar. Comienzo el examen.
Le abrió un párpado. Sus ojos estaban completamente negros. Carecían de iris.
— El iris ha desaparecido de sus ojos.
La mujer cogió unas pinzas y extrajo una pequeña astilla de uno de los ojos del cadáver.
— Encontrada astilla de escasos milímetros en el lagrimal derecho.
Amelia se puso los guantes de goma mientras sus ojos realizaban la primera inspección del cadáver.
— Hombre joven, de unos veinte años —comenzó Amelia a constatar con su grabadora—. Caucásico, unos cuarenta kilos de peso. Presenta una grave desnutrición. Parece recubierto de un líquido amarillento. Las muestras se han enviado a analizar. Comienzo el examen.
Le abrió un párpado. Sus ojos estaban completamente negros. Carecían de iris.
— El iris ha desaparecido de sus ojos.
La mujer cogió unas pinzas y extrajo una pequeña astilla de uno de los ojos del cadáver.
— Encontrada astilla de escasos milímetros en el lagrimal derecho.
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